CreandoArte

  Destape una botella de vino, quería desahogarme con ella, quería recordar el pasado, si, soy un poco masoquista, recordar quema, duele, te arde en el alma, pero que seria de nosotros sin nuestros más preciados recuerdos, esos que te dan nostalgia y te hacen un nudo en la garganta, que maravilla, la luna, las estrellas y una botella de vino, que más podría pedir en ese momento, lo era todo y nada al mismo tiempo, creía que me haría sentir mejor, pero solo me hundía en un profundo abismo de emociones, esos en los que empiezas a llorar por algo y terminas llorando por mil y un cosas más, pero esta bien, llorar esta bien, la tristeza es tan necesaria como la misma alegría, te ayuda a sanar, a drenar toda ese sentimiento que tienes dentro, despiertas como el sol después de una tormenta, más brillante que nunca.

Mi primer amor fue muy especial, porque desde que me conoció no ha dejado de verme con ojos de amor, porque ha hecho hasta lo imposible por verme feliz, me amo desde el primer momento que me vio, fue como quien dice, amor a primera vista y es que hemos aprendido tanto uno del otro, cuando caía el me levantaba, cuando tenía dudas el las aclaraba, cuando en el exterior el mundo se estaba acabando, nosotros veíamos una película y comíamos dulces en el suelo, cuando me abrazaba y sentía que solo ahí estaría protegida, quien limpiaba mis lágrimas y me hacía reír, pequeños momentos de felicidad que son los que realmente importan y es que hasta debajo de un puente sería feliz con tan solo tenerlo cerca; así tuviera mil y un preocupaciones, al llegar a casa el las dejaba en la puerta y sonreía como si nada pasara, gracias por ser el mejor papá del mundo.